Cultura en las alturas

Como organización, nuestra motivación tiene que ver fundamentalmente con la cultura popular, entendida en la participación de todo el pueblo como creadores y espectadores de su propio sentir. Aclaramos esto para situar nuestra opinión ante el freno que pone el sistema a cualquier medida que pretenda trasgredir su carta de navegación para cumplir sus objetivos políticos y que por estos días se manifiesta en la mantención en Concepción de la sede regional de la “nueva institucionalidad cultural”. Para quienes han opinado por estos días, evidentemente el tema fundamental NO es la descentralización, sino el deseo de tener en Chillán una OFICINA en cuyo interior se hagan pauteadas reuniones sobre que es bueno y que es inoportuno entregar al pueblo como oferta y desarrollo cultural, por lo visto con una planilla funcionaria que aparentemente en su totalidad residen en Concepción (fue argumento al decir que sería difícil para los cultos trasladarse hasta Chillán). Autoridades locales, agentes culturales y los próceres del Pinochetismo, (estos últimos, desmanteladores del momento más luminoso que vivió Chile en materia cultural), alzan voces para que se cumpla la palabra empeñada por la autoridad. - Como estamos también en el rescate de la memoria, les recordamos que hace mucho tiempo que las promesas no se cumplen en materia de medidas o programas de gobierno. Si de tener una oficina se trata, pensemos por unos instantes lo que significaría para nuestra ciudad si la sede de la Gobernación Provincial de Ñuble estuviera en otra comuna… ¿Perderíamos esa rica comunicación e interacción entre el Gobierno y la ciudadanía? ¿Nos sentiríamos desprotegidos o nos sobrecogería una sensación de profundo desamparo? Sabemos la capacidad e intención de las autoridades en mantenerse alejados de todo lo que huela a exigencia y no-oficial. Si no hay interacción no hay descentralización. Para quienes gobiernan, descentralizar es en esencia acercar al vulgo lo que para los poderosos sigue siendo privilegio. Bajo esta premisa descentralización es poner muy cerca de las organizaciones populares una poderosa arma, históricamente utilizada por comunidades que han llegado a establecer a través de un acabado y seductor concepto estético, formas de comunicación masiva, que los hace percibir una realidad de la que indefectiblemente nace más organización popular. La condición fundamental para que exista descentralización es la participación democrática de los ciudadanos en las decisiones, no sólo sobre gasto sino, principalmente, sobre los aportes que ellos realizarán para un cambio de discurso y acción cultural. En materia de consumo cultural y uso del tiempo libre en la provincia, más del 80% de la población se limita a un consumo cultural de pobreza, es decir, a un consumo marcado por la oferta de los medios de comunicación, esto significa que las desigualdades sociales vuelven a expresarse en la cultura con muchísima fuerza, es decir, hay un grupo muy importante de la población que sólo accede a la televisión y la radio, pero no a las otras manifestaciones culturales y sobre todo, no pueden llegar a los centros de actividad u oferta cultural. En este sentido, no sólo los mínimos presupuestos dan fe del desinterés de los gobiernos y la falta de exigencia social, la mayoría de las veces sólo se patrocina lo conmemorativo, el centenario del ilustre músico, pintor o escultor, los homenajes en vida a las glorias nacionales, el reconocimiento de las culturas indígenas: si prometen ser especies en extinción. Lo estratégico para lograr los objetivos buscados sería profundizar la descentralización política de la provisión de infraestructura y servicios culturales, y sobre esto sentar las bases que permita garantizar a todos los habitantes el acceso igualitario a una canasta cultural. El auspicio a la cultura popular que hasta ahora se resuelve en la injusta repartición del ingreso que solo deja la nostalgia al alcance de las clases populares. Todo esto significa, en inmensa medida, el fin de la movilidad social, y la emisión de una verdad conocida y olvidada: Si menos piensas, si menos sabes…menos reclamas.

- - Diseño: EdoSolis | Derechos Reservados Recursos Fotografías Investigaciön
ir arriba