“Toros” en Centro de Extensión UDEC

Lo mejor del poeta Pablo Neruda y del pintor Pablo Picasso está en nuestra ciudad de la mano de Fundación Itaú, entidad que el año pasado logró reeditar el libro “Toros” que los dos personajes del Siglo XX realizaron en 1960.

Sólo 500 ejemplares del libro lograron ser distribuidos entre Francia y Chile y la mayor parte quedó en manos de coleccionistas.

Es por esto que la Fundación Itaú decidió hacer una apuesta por la cultura y lograr una nueva edición del libro, hecho en su tiempo completamente a mano.

En la exposición que se realiza en el Centro de Extensión de la Universidad de Concepción, sede Chillán, se pueden apreciar bocetos que Pablo Picasso realizó el año ‘60 para ilustrar el poema “Toros” del poeta chileno nacido en Parral.

Además, se está exhibiendo una copia exacta de la primera edición de “Toros” que los artistas estrenaron el mismo año.

Una de estas carpetas quedó en Chillán, como una donación de la Fundación Itaú para la comunidad, como un gesto que la entidad ha realizado en todas las ciudades que han contado con esta espectacular exposición.

“TOROS”.

La primera edición demoró cerca de dos años en salir de imprenta. Fue un trabajo hecho a mano en Francia por los mejores artesanos de la zona y bajo la supervisión de Picasso.

Neruda contribuyó desde Chile mediante el correo convencional hasta lograr editar el poema y adjuntar los bocetos que Picasso hizo especialmente para esta ocasión.

La amistad entre estos dos “grandes” se gestó en la década de los ‘30 cuando ambos participaban de una actividad en adhesión a las víctimas de la Guerra Civil Española.

El artista plástico había terminado hace poco de concluir su obra “Guernica” y el poeta chileno ya había escrito “España en el Corazón” profundamente afectado por los hechos ocurridos durante la guerra.

No se volvieron a ver las caras hasta 1948, cuando a causa de la llamada “Ley Maldita” promulgada en Chile por el Presidente Gabriel González Videla, Neruda debió irse del país a caballo.

El poeta desapareció misteriosamente hasta un año más tarde, cuando reapareció en la sesión final del Congreso por la Paz en París. El taller de Picasso había sido su secreto refugio.

No sólo compartieron su arte. En 1973 Picasso partía de este mundo y un choqueado Neruda lo hacía un tiempo después.

Detrás de esta exposición no sólo se encuentran pinturas de Picasso y poemas de Neruda sino que una historia que unió a fuego a estas dos figuras.

La Guerra Civil Española, la “Ley Maldita” y la muerte de ambos en 1973 sin duda son hechos históricos que establecieron un hito no sólo en la letra, sino que también marcaron a dos genialidades del siglo que recién pasó. “Toros” de Picasso y Neruda se encontrará abierta al público hasta el 2 de julio. Tomado de LA DISCUSION

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